viernes, 26 de septiembre de 2008

Charallave, charavares, charaguares
Municipio Cristóbal Rojas, Edo. Miranda

Extraña cacofonía la que surge entre el nombre de Charallave y sus antiguos habitantes (los charavares y charaguares). La Enciclopedia de los municipios venezolanos informa que el original poblado de Santa Rosa de Lima de Charallave fue fundado en 1681 por el padre Cirilo de Antoniete. Contaba entre sus feligreses mayormente con indios libre que habitaban en lo que hoy es plaza Páez. El poblado se convertiría en una fértil región agropecuaria cargada de caña, cacao y maíz.

Hoy día sigue siendo fértil, pero de otra manera. A las 5 de la tarde se pueden ver los ríos de trabajadores saliendo alegres de sus fábricas: hoy Charallave es sitio preferido por cientos de empresas y comerciantes. Su crecimiento se ha visto recompensado por el mejor regalo, un ferrocarril que transporta diariamente a miles de personas. Pero como todo centro urbano, sobra decir que la inseguridad crece a medida que aumenta el hacinamiento y el estilo de vida marginado de comodidades básicas y servicios. Desde una perspectiva de urbanista ¿Cómo la alcadesa Marisela Mendoza ha atacado esta corrupción citadina?

viernes, 19 de septiembre de 2008

Soñando naturaleza

Soñando naturaleza
(o sobre cuánto deseo conocer el Hato Piñero)
Municipio Girardot, estado Cojedes


Hace unos meses, mirando la Enciclopedia de los Municipios Venezolanos un domingo en la tarde, comencé a leer sobre el municipio Girardot. Pasando por encima de sus platos tradicionales (el tradicional pisillo de chigüire y los buñuelos con papelón), lo que más me interesó fue el Hato Piñero.

Desconocía que en Venezuela tuviéramos uno de los primeros ejemplos históricos de ecoturismo. Amantes del llano, la familia Branger tiene una especie de posada en un ambiente totalmente preservado de la contaminación. De hecho, albergan cientos de especies distintas de animales. Su atractivo turístico como posada reside básicamente en promover diversión natural, que no atenta ni altera la naturaleza.

Imagino que una de las bondades del hato debe ser la posibilidad de convertirse en espía de la naturaleza en su estado más salvaje, tal como se hace durante las excursiones que la familia organiza en el lugar. De hecho, el Hato Piñero –además de recibir turistas– alberga estudiosos de la fauna y flora venezolana. Yo, aburrida en mi habitación y sentada en la mecedora en la que suelo leer, suspiro ante la fantasía de una canoa llanera, en tiempos de lluvia, durante una puesta de sol naranja. Oigo el sonido de las aves que graznan como recibiéndome. Y estoy segura: ¡municipio Girardot, espérame pronto! :-D

viernes, 5 de septiembre de 2008

Garantía de un buen momento

GARANTIA DE UN BUEN MOMENTO
Municipio Andrés Eloy Blanco, estado Lara.


A veces, los lugares son interesantes por lo que hace la gente y, otras, se dejan disfrutar gracias a sus riquezas paisajísticas y naturales. Tuve la fortuna de encontrar estas dos cualidades mezcladas en el municipio Andrés Eloy Blanco del estado Lara.

Tal como refiere la Enciclopedia de Municipios Venezolanos en el municipio abunda la artesanía, la cual presenta piedra tallada, cerámica, objetos en madera y tejidos. Por otra parte, el poblado se ha encargado de preservar su barrio colonial conocido como El Cerrito.

El amor por las celebraciones de los nativos del municipio se transmite durante tres fiestas religiosas especialmente: El día de San Antonio de Padua (12 de junio), Santa Ana (26 de julio) y las fiestas de los Santos Inocentes (28 de diciembre).

En cuanto a los paisajes, Sanare tiene dos parques nacionales (Yacambú y Guache) que resguardan especies en peligro de extinción como el cunaguaro y el oso frontino. Además cuenta con numerosas quebradas que bendicen en clima y suelos secos. Da gusto después de una caminata, hundir el cuerpo en aguas frescas y de constante fluir. Que lo digan mis piecitos cansados ;)

lunes, 1 de septiembre de 2008

Para ordenar el mundo, comience por casa

Para ordenar el mundo, comience por casa
Municipio Independencia, Edo. Yaracuy


Tal parecía ser la idea del alcalde Rafael Antonio Parra, cuyo plan de gobierno tenía tres objetivos principales, según la Enciclopedia de municipios venezolanos: rehabilitar el casco histórico del municipio, el mercado popular y la alcaldía. Por otra parte también se propuso el asfaltado de calles, construcción y mantenimiento de semáforos.

Contándole a unos amigos sobre el proyecto del alcalde, se sorprendieron por su sencillez: no planteó más que arreglar lo que estaba roto y poner lo que hacía falta. Con sencillas promesas pudo ganar las elecciones y mantener su gestión por tres años. Este sentido de lo necesario y lo inmediato y la ausencia de pajaritos preñados nos pareció justo lo que se necesita en estos tiempos. Sin embargo, amigo yaracuyano, ¿qué piensa usted sobre el desarrollo del municipio Independencia durante estos últimos tres años? ¿Le agregaría algo a esta pragmática gestión?